Las 10 peores ciudades para vivir en Europa

Europa siempre ha sido uno de los destinos más populares para quienes buscan iniciar una nueva vida. Especialmente, porque muchas de sus ciudades son conocidas por su estilo de vida de alta calidad, rica historia, cultura diversa, ambientes coloridos, infraestructura moderna y paisajes pintorescos.

Por eso, no es de extrañar que profesionales, estudiantes y jubilados de todo el mundo se sienten atraídos por el viejo continente.

Sin embargo, es importante que no tomemos una decisión a la ligera, ya que la vida en este continente no es un lecho de rosas para todos los forasteros.

Al contrario de lo que mucha gente cree, ciertas ciudades son conocidas por sus desagradables condiciones de vida, como economía inestable, mal clima, gente hostil, altos índices de criminalidad, regulaciones intrusivas y acceso limitado al sistema de salud, por nombrar sólo algunos aspectos.

Como consecuencia, en Q’ Pasa te compartimos un listado con las 10 peores ciudades para vivir en Europa.

Alicante, España

Alicante es una ciudad que cuenta con muy poca oferta educativa de calidad. Es por eso que muchos alicantinos optan por irse de la ciudad para emprender sus etapas de estudios postgrado. Sus propios habitantes advierten que su sistema educativo necesita reformas urgentes.

La falta de oportunidades laborales sigue siendo una de las mayores preocupaciones para los alicantinos. El año pasado, la tasa de desempleados en la provincia se ubicó en un alto 18,2%. Es cierto que el número de desempleados disminuye significativamente en los meses de verano, pero también lo es que cuando acaba el estío la mayoría de esas personas vuelven a las oficinas del Inem.

La sanidad es otro de los puntos flojos de esta ciudad. Tantos recortes sanitarios han terminado por influir en la calidad de las atenciones médicas. En la actualidad, no es un buen negocio ponerse enfermo en Alicante.

Milán, Italia

Vivir en Milán puede ser una experiencia muy enriquecedora, pero también puede conllevar algunos contras que tienen un alto costo literalmente, y es que Milán es una ciudad bastante costosa.

Los precios de alquiler, el transporte, la gasolina, la ropa y llenar el carro de la compra te saldrá más caro que el promedio del resto de ciudades de Europa.

Sumado a esto, el transporte público no es nada eficaz, ya que hay muy pocas líneas de metro y las huelgas de los transportistas son el pan de cada día, además que se conduce muy mal.

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Si lo miramos desde una perspectiva más cultural, a mucha gente Milán le parece una ciudad frívola, incluso muchos opinan que es fea.

Tirana, Albania

Tirana, sigue siendo un misterio para la mayoría de los forasteros. Desafortunadamente, la lucha del comunismo a la democracia no es la única razón por la que la mayoría de los expatriados temen mudarse a esta ciudad.

Los expatriados que viven en Tirana afirman que la ciudad todavía está luchando por recuperarse del legado de sus días soviéticos.

A pesar de que ha habido signos positivos de crecimiento, Albania es una de las naciones más pobres y subdesarrolladas del continente. Los residentes tienen un poder adquisitivo muy bajo en comparación con otros países europeos.

Adicionalmente, tiene un alto índice de corrupción, una mala infraestructura y un costo alta en sus bienes raíces. Las tasas de desempleo en el país también han sido consistentemente altas por lo que muchos albaneses buscan oportunidades laborales en Grecia, Alemania o Italia.

De modo que, es importante que solo considere mudarse a Tirana después de recibir una buena oferta. De lo contrario, es posible que te encuentres desempleado durante un largo período de tiempo si intentas buscar trabajo después de llegar al país.

Nottingham, Inglaterra

Según varias encuestas Nottingham se encuentra entre las cinco principales ciudades de Inglaterra con personas que experimentan estrés extremo.

El motivo se debe al impacto de la pandemia, que ha tenido un gran efecto en sus puestos de trabajo. Así las cosas, ahora mismo, el empleo seguro es un problema constante en la ciudad.

Por estas razones, Nottingham es una de las ciudades más miserables de Inglaterra y Europa, debido a los altos niveles de estrés entre los residentes y su incapacidad para mantener un empleo seguro.

Madrid, España

De acuerdo con una encuesta reciente, según los propios habitantes, Madrid es la ciudad española con peor calidad de vida.

la baja valoración destaca sobre todo en contaminación y medio ambiente, coste de la vida, mercado inmobiliario y limpieza. Y es que, a pesar de que los gobernantes han hecho algún tímido esfuerzo por reducir los niveles de contaminación, la realidad es que Madrid sigue siendo una de las ciudades más contaminadas de toda Europa. La calidad del aire que respiran los madrileños no es buena, lo que puede derivar en algunos problemas de salud.

Por otra parte, si bien España es un país muy seguro para ir por la calle, en Madrid conviene echar un ojo de más cuando vas solo y a altas horas de la noche. Las estadísticas nos muestran que es la tercera ciudad de España con más delitos por cada 100.000 habitantes.

Otra de las razones por las que se encuentra en este listado es porque el costo de vida en Madrid es significativamente mayor que en las demás ciudades españolas. Gran parte de la culpa la tiene el elevado precio de la vivienda, ya que por menos de 800 euros es difícil que puedas alquilar un lugar que esté en buenas condiciones.

Glasgow, Escocia

Glasgow es la ciudad más grande de Escocia, ubicada en el Reino Unido. Se sabe desde hace mucho tiempo que Glasgow tiene problemas con las guerras territoriales entre pandillas. Debido a este y otros actos de violencia, ha habido informes de muchas muertes a lo largo de los años. En 2010, ocurrieron un total de 30 asesinatos y esto promedió el número de muertes violentas que ocurren en Glasgow cada año.

Las guerras territoriales y de pandillas hacen de Glasgow una de las ciudades menos seguras de toda Europa y, especialmente, del Reino Unido. La tasa de homicidios es de 5,1 asesinatos por cada 100 mil habitantes, lo que la hace insegura para las personas en cualquier época del año.

Roma, Italia

En varias oportunidades Roma ha sido calificada como la peor ciudad para vivir de un expatriado, entre las razones más importantes se encuentra que quienes emigran a esta localidad, no están satisfechos con las oportunidades profesionales, la seguridad laboral e incluso por bajo nivel en el equilibrio entre la vida y el trabajo.

Asimismo, se ha dicho que Roma está abarrotada de turistas, por lo que es muy difícil transitar por sus calles. Igualmente, hay que andar con mil ojos abiertos cada vez que quieras cruzar la acera, ya que los conductores son muy imprudentes y se saltan las normas de tráfico con más frecuencia de la que te imaginas.

Por si fuera poco, la burocracia en Italia es muy lenta, por lo que cada proceso administrativo que quieras hacer acabará convirtiéndose en una odisea. Si no eres ciudadano de la Unión Europea y quieres tramitar tu residencia en el país te recomendamos que armarte de paciencia.

Otro de los motivos por los que se encuentra en este ranking, es debido a la inseguridad, debido a que aquí se debe tener especial cuidado con las pertenencias, especialmente en el metro o entre una multitud, ya que los ladrones y carteristas cada vez emplean trucos más sofisticados para robar a sus víctimas, las cuales suelen ser mayoritariamente gente con apariencia de turista.

Marsella, Francia

La ciudad de Marsella es considerada como uno de los peores lugares de Europa para vivir.

Ubicada en la región sur de Francia, la ciudad es uno de los puertos comerciales más grandes del país y un importante centro de actividad económica. El inconveniente es que, de la misma manera, también han llegado por este medio delincuentes que se ganan la vida aprovechándose de los vulnerables.

La incidencia de carteristas, atracos y otros tipos de pequeños hurtos es mayor en Marsella que en cualquier otra gran ciudad de Francia. La tasa de criminalidad es alta y el número de policías es bajo. Este problema existe debido a la baja inversión en la aplicación de la ley debido a la desigualdad y la corrupción.

Lisboa, Portugal

Lisboa es una ciudad tranquila, bonita, con un clima muy agradable y vida nocturna animada. Sin embargo, tiene unos aspectos negativos que la hacer acreedora de un lugar en este ranking.

Uno de sus puntos débiles, es sin duda la condición sanitaria. La atención médica está constituida como un derecho en Portugal, pero las clínicas y los hospitales dejan mucho que desear. Además, están muy masificados y cada vez que tengas una urgencia médica tendrás que perder una buena parte de tu tiempo.

Por otro lado, Lisboa es una ciudad muy contaminada, hasta tal punto que el gobierno portugués ha tenido que tomar medidas para intentar disminuir los niveles de polución. Algunas de estas medidas son cortar el tráfico en ciertas zonas del centro y multar a los vehículos con más de 15 años de antigüedad que estén circulando por las calles.

En cuanto al costo de vida, si bien es una ciudad realmente barata con respecto a la media de Europa, también hay que tener en cuenta que tiene uno de los salarios más bajos del continente.

Moscú, Rusia

Más allá, de la situación actual que se vive con Ucraina, Moscú siempre ha sido considerado un destino interesante pero desafiante, debido a que ofrece una amplia variedad de experiencias, pero no todas son agradables.

El fuerte choque cultural cuando se mudan por primera vez es una situación a la que los forasteros se enfrentan.

Además, Moscú, la capital de Rusia, es catalogado como un lugar bastante caro. Y, a pesar de su alto costo de vida, está bastante subdesarrollado.

Puedes disfrutar de un estilo de vida lujoso que está a la par con cualquier ciudad europea internacional importante, siempre que estés dispuesto a pagar por el privilegio. De lo contrario, no te sorprendas si te encuentra carente de las necesidades básicas.

Por ejemplo, la educación pública y la atención médica definitivamente se consideran deficientes, incluso por parte de la población local. Hay varias instalaciones privadas en la capital, pero tienen un precio extremadamente alto.

La comunicación también es considerada un gran problema, puesto que es necesario asegurarse de ganar algo de fluidez en ruso básico y aprende a leer cirílico incluso antes de llegar allí. El inglés es ampliamente entendido por la mayoría de los jóvenes, pero rara vez se habla.

Por otro lado, las altas tasas de criminalidad y los incidentes de violencia, así como el racismo y la discriminación basados ​​en preferencias sexuales, son otros factores que hacen de Moscú una de las ciudades más desagradables para vivir en toda Europa.