El gobierno de Legault tiene la intención de presentar un reglamento el próximo verano para prohibir el La extracción de garras y varias otras cirugías en animales de compañía, una demanda de larga data de numerosas asociaciones.
El Ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, André Lamontagne, respondió afirmativamente el martes a una petición de 21 652 nombres presentada el 1 de febrero de 2022 para pedir la prohibición de todas las cirugías no preventivas y no terapéuticas en animales de compañía.
“Teniendo en cuenta los últimos avances científicos y las posiciones de las partes implicadas, el Reglamento propondrá prohibir, salvo en el caso de una indicación médica recomendada por un médico veterinario, las siguientes cirugías: la de vocalización, la cordectomía (tamaño de cola) y la onixectomía (desgarre) efectuadas a un gato o a un perro, así como el adormecimiento (tamaño de orejas) en el perro”, escribe en su respuesta.
André Lamontagne precisa que varias asociaciones habían sido previamente consultadas en diciembre pasado, entre ellas la Orden de los médicos veterinarios de Quebec (OMVQ), la Asociación canadiense de médicos veterinarios de Quebec (ACMV), la Asociación de médicos veterinarios de Quebec (AMVQ), Anima-Québec y la Asociación quebequesa de los SPA y SPCA(AQSS).
“El proyecto de reglamento fue muy bien recibido“, añade.
El miércoles, la SPCA de Montreal celebró la noticia através de un mensaje publicado en su página de Facebook.
“La SPCA de Montreal ha estado trabajando durante varios años para hacer de estas cirugías una cosa del pasado, ¡solo podemos aplaudir esta decisión!”, dijo el organismo.
La onixectomía, o desgarre, es una intervención quirúrgica consistente en una amputación de la tercera falange del dedo de un gato, precisa el OMVQ en su sitio web.
Si bien esta práctica no es necesaria desde el punto de vista médico, ha sido estandarizada para satisfacer las necesidades de los humanos, añade el organismo.
“Hoy sabemos que se trata de una intervención que no debe tomarse a la ligera y que es importante considerar las demás opciones antes de recurrir a ellas”, indica.[Efectivamente] esta intervención quirúrgica podría provocar una deformación (contractura) de los dedos causando dolor al caminar”.
Unos cuarenta países de todo el mundo y varias provincias canadienses ya han prohibido esta práctica.
Fuente: Agence QMI
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