Antes del mediodía de ayer domingo, el operativo policial puesto en marcha en Ottawa dio sus frutos. Los manifestantes, que mantenían a la ciudad sitiada desde hacía 23 días, fueron siendo reducidos poco a poco, hasta quedar fuera del perímetro establecido por la policía.
Las calles, aunque estaban cubiertas de nieve, lucían vacías; solo un pequeño grupo de los manifestantes que no se convencían de lo que había pasado, quedaban rondando, dispersos; igualmente se veían algunos vehículos abandonados, que la policía continuaba remolcándolos.
Más tarde, los desalojados empezaron a relocalizarse en algunos puntos fuera del centro de Ottawa. La televisión fue a su alcance, pero no fueron bien recibidos. Habrá que esperar la evolución de los hechos.
Durante los dos días de desalojo, se produjeron un total de 191 arrestos, 79 vehículos remolcados, 3 600 papeletas de infracciones expedidas, y por lo menos 389 juicios abiertos por diversos motivos. Algunos detenidos ya han sido liberados bajo caución.
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Antes
La policía avanza paso a paso en segundo día de intervención
Tras la puesta en marcha este viernes de una colosal y seguramente costosa arremetida policial, destinada a desocupar el centro de Ottawa, que se encuentra sitiada desde hace 23 días por grupos de manifestantes, los esfuerzos de la policía empiezan a dar resultados.
Desde temprano la policía viene aplicando la misma estrategia implementada para desocupar de manifestantes el puente Ambassador, ocurrida hace algunos días. Pero aquí la resistencia de los manifestantes es más fuerte. Si bien la policía por ahora se contenta con avanzar paso a paso, hasta cierto grado controlado y pacífico; no se ha podido evitar episodios tensos con empujones entre manifestantes y policías.
Para el mediodía de este sábado, se registraban poco más de 100 arrestos en la zona.
La policía de Ottawa, fortalecida con unidades de otras provincias, incluyendo Quebec, es la que está en primera línea.
El escenario más evidente se desarrolla en las calles circundantes al Parlamento canadiense. Se observa la presencia de numerosos carros policiales blindados, furgonetas, buses, ambulancias, carros de bomberos; un destacamento de la GRC a caballo; otros policías fuertemente equipados con armas disuasivas y máscaras antigás.
Hasta hoy se han producido numerosos arrestos, entre ellos el de Pat King, uno de los más fieros organizadores del movimiento, quien en su último mensaje antes de ser arrestado, arengaba a sus tropas a “guardar la línea” (resistir). Antes ya se había arrestado a Tamara Lich y Chris Barber, dos otros organizadores de la manifestación.
