Siempre estamos buscando maneras de mejorar aspectos de nuestra vida que no nos gustan o de crecer como personas, pero a veces ponemos metas que rápidamente olvidamos o que son delegadas a un segundo plano. Si realmente quieres mejorar tu vida puedes empezar creando hábitos que suman día a día al cambio y que nos hacen retomar el rumbo, dejar el estrés y encontrarnos con nuestro yo interior.
Muchas personas tienden a fallar con sus resoluciones y deseos porque hacen un cambio demasiado abrupto de sus comportamientos regulares y comienzan a llevar a cabo otros nuevos.
Empezar con pequeños cambios es algo que puede resultar en una mejoría significativa y duradera, pero siempre es necesario tener disciplina y voluntad, de lo contrario será muy fácil abandonar estos hábitos antes de que tengan un resultado positivo.
Estos 10 hábitos pueden mejorar tu forma de vida en 7 días.
- Define metas
– ¿Qué camino debo seguir?, dijo Alicia
-Eso depende del sitio al que quieras llegar, le contestó Chesire
– No importa mucho el sitio, replicó Alicia
-Entonces tampoco importa el camino que tomes, dijo el gato
Si no tienes claras tus metas es difícil que puedas tomar el camino que te acerque a ellas, algunas veces dejamos los resultados a la suerte y cuando las cosas no salen como esperábamos culpamos al universo porque no escuchó nuestros deseos.
Lo primero que debemos hacer para empezar a ver resultados positivos en nuestra vida es tener metas y sueños claros, así podremos empezar a tomar decisiones que nos lleven más cerca de ellos.
- Elimina el desorden
Uno de los factores que influye en nuestra productividad, es el orden, a través de varios estudios se ha demostrado que trabajar en un espacio bien ordenado genera mayor capacidad de concentración en el cerebro, ya que no encuentra distracciones y se enfoca en el momento presente.
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Así que si quieres mejor tu productividad empieza por ordenar tu sitio de trabajo, al igual que tu cuarto y tu casa.
Vivir en una casa ordenada contribuye a la tranquilidad y salud, ya que se eliminan partículas de polvo y mugre que nos pueden enfermar.
- Tiende la cama todos los días
Por sencillo que parezca, esta actividad contribuye a empezar el día con mayor energía.
Algunas personas por falta de tiempo o por pereza dejan su cama destendida y se ha encontrado que estas personas sufren de sentimientos de cansancio con mayor facilidad y frecuencia que aquellas que deciden ordenar su cama en la mañana.
Incluso existe una conferencia que se llama “si quieres cambiar al mundo empieza por tender tu cama”, en esta conferencia se explica como adquirir el habito de tender la cama puede tener un efecto enérgico en las personas y como además puede contribuir a la creación de otros buenos hábitos.
- Haz ejercicio
Más allá de los beneficios estéticos que trae la práctica de ejercicio, este hábito ayuda a reducir el estrés, mejorar el humor e incluso ayuda a controlar tu apetito.
Si practicas ejercicio regularmente seguramente empezarás a sentirte más activo y positivo frente a la vida.
Además, las personas que hacen ejercicio reaccionan de mejor manera a situaciones estresantes, ya que sus cuerpos experimentan sensaciones similares a la hora de ejercitarse.
Si hasta ahora el sedentarismo es lo que predomina en tu vida, toma la decisión de comenzar, lo único que lamentarás será no haber comenzado antes.
- Aprende algo nuevo
A veces tenemos en mente algo que quisiéramos aprender o algo que nos interesa, pero por diferentes motivos lo dejamos a un lado.
Aprender nuevas habilidades se convierte en nuevas oportunidades en el futuro.
Por ejemplo, si te interesa la ilustración comienza con un curso de Adobe Illustrator y date el tiempo para practicar y mejorar, el primer paso es tomar la decisión y después crear un compromiso.
Si en algún momento enfrentas dificultades puedes recurrir a herramientas como YouTube, que son plataformas donde puedes encontrar consejos e incluso atajos para obtener mejores resultados.
- Enfrenta tus miedos
Muchas veces los miedos nos retrasan o nos cohíben de poder vivir la vida como soñamos,es importante aprender a conocernos e identificar los miedos que nos afectan.
Ten en cuenta que no todos los miedos son algo negativo, algunos de ellos nos protegen de situaciones peligrosas y son instintivos, pero, otros son miedos infundados o fantasiosos que crean escenarios poco posibles y que finalmente tienen un efecto negativo.
Vencer los miedos es un proceso que toma tiempo, pero puedes empezar por identificar algo que en este momento te cause problemas, por ejemplo, comunicarte en público, o miedo a fracasar.
Después de identificar los miedos es importante empezar a utilizar herramientas que nos ayuden a vencerlos, si tu miedo es comunicarte en publico puedes empezar a practicar en el espejo o pedirle a alguien de confianza y con quien te sientas cómodo que escuche un discurso que preparaste.
Esto claro, se puede adaptar dependiendo de las necesidades.
Cuando empezamos a superar los miedos, la vida parece un poco más fácil.
- Maneja tu tiempo
Algunas personas son victimas del tiempo y sienten que no pueden controlarlo, estas personas se ven diariamente llegando tarde y experimentando sensaciones de cansancio y agotamiento.
Aprender a manejar el tiempo es una herramienta esencial para llevar una vida más placentera y tranquila.
En algunas ocasiones la falta de tiempo es en realidad falta de organización y una mejor distribución.
Si esto te pasa, puedes empezar por hacer citas, compromisos contigo mismo, por ejemplo, si quieres empezar un nuevo proyecto destina un tiempo diario que deberás cumplir, en caso de incumplir te estarás faltando a ti y a tus sueños.
Y si este punto definitivamente te genera un problema, agenda tus días, destina el tiempo aproximado que podrás sacar para cada actividad y finalmente calcula tus horas de sueño, ya que esto contribuye directamente a tu rendimiento diario.
- Lee 10 minutos diariamente
Adoptar el hábito de la lectura es algo que sin duda puede cambiar vidas.
Esto es algo que muchas personas esperan hacer, pero se encuentran con libros abandonados en la mesita de noche que terminan siendo pisapapeles o el soporte del vaso.
En algunas ocasiones las personas se determinan a leer, pero la pereza y el sueño los invaden rápidamente.
Leer 10 minutos al día, aunque parezca corto, es algo que poco a poco se convierte en un hábito y que irá llenando tu cabeza con todas esas herramientas que necesitas para realizar tus sueños.
Pero claro, es importante escoger libros que te proporcionen herramientas clave para lo que esperas lograr, por ejemplo, si lo que quieres se emprendedor y tener tu propio negocio, escoge libros de emprendimiento e inteligencia financiera, o si lo que esperas es tener mejores relaciones con las personas, busca esos libros que te puedan ayudar en ese camino.
- Escucha conferencias o Podcasts
Algo que puede cambiar tu vida es escuchar conferencias de personas que han alcanzado lo que tu sueñas.
Estas personas pueden servir como guías y ayudarte a tomar un rumbo más certero.
Esto no quiere decir que debas imitar a estas personas, pero en muchos casos cuando escuchas conferencias o podcasts tienes accesos a otros puntos de vista que enriquecen tu pensamiento y te llevan a tomar decisiones más sabias o apropiadas.
En ocasiones nos sentimos perdidos, no sabemos si lo que estamos haciendo ahora de verdad nos puede llevar a eso que esperamos del futuro, escuchar las experiencias de vida de otras personas puede contribuir positivamente y servir como motivación para saber que los sueños y las metas si se pueden alcanzar.
Pero, ten cuidado a la hora de elegir a tus posibles influenciadores, busca a esas personas que creas que de verdad pueden aportarte algo.
- Conecta con las personas que te rodean
Hay momentos de la vida donde nos sumergimos tanto en el trabajo y proyectos personales que nos olvidamos de conectar con las personas que están cerca.
Claro, es importante dedicar tiempo a todo lo que te interesa, pero una de las cosas que hace más completa la experiencia de vivir es compartir con la familia o con buenos amigos.
Saca un momento de tu día para hablar con alguien de tu familia a quien a veces dejas de lado o que olvidas el rol que representa para ti.
Compartir con alguien que amas puede liberar dopamina en el cerebro y contribuir a que tu día a día sea más placentero y tranquilo.
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