¿Ya preparó su casa para la llegada del invierno?

Mire los techos, si hay goteras, si hay humedad, porque así como el cuerpo necesita abrigos, bufandas, guantes, botas y todo eso que alistamos para la temporada invernal para protegernos del frio, nuestras casas también requieren una preparación especial para enfrentar el inclemente clima en Canadá, trabajos que se deben realizar muchas semanas antes que caiga la primera nevada.

No deje para mañana, y mucho menos pera cuando llegue el invierno, esas pequeñas o grandes reparaciones que se requieren en su vivienda para que no tenga problemas, recuerde que siempre los canadienses en el verano y el otoño todos se preparan para la fuerte temporada, de nieve, frio y hielo, porque eso le puede evitar muchos dolores de cabeza, y especialmente evitar accidentes o daños que pueden resultar muy costosos.

Hay un adagio muy popular, es mejor prevenir que lamentar, que los canadienses saben aplicar sistemáticamente porque toda la vida e históricamente se han acostumbrado a que se deben preparar para la llegada del invierno, algo que muchos latinos no terminan por aplicar. Los arreglos de las casas no dan espera si se aproxima el invierno, y aunque aún nos quedan algunas semana para la larga temporada fría, si no ha hecho las reparaciones, aún le queda tiempo para hacerlas.

Como inmigrantes latinos muchos no saben que las casas necesitan que algunos ajustes antes de las caída de la primera nevada. Una de las primeras recomendaciones que hacen los expertos es que se revise todo el sistema de calefacción de la casa, la chimenea, la caldera y los conductos, porque anualmente muchas personas deben acudir al llamado de emergencia cuando se quedan sin el servicio por su mal mantenimiento.

Si su casa es viaja es importante que las personas revisen el ático y el techo, verificando que el material aislante está en perfectas condiciones, si no hay rasgos de filtraciones de agua, goteras o si hay algún tipo de hundimiento, humedad o madera podrida, porque en caso de acumulación de nieve, esta podría ceder por el peso y generar un grave daño en toda la propiedad, que seguramente obligará a los residentes a buscar refugio en otro lugar, porque estas reparaciones por lo general no se pueden realizar en invierno y mucho menos cuando cae nieve.

El sistema de aislamiento en los sótanos también es otro punto para tener muy en cuenta, especialmente si este está bajo tierra, porque el agua se puede filtrar por las ventanas y al bajar las temperaturas congelan todo, hasta las tuberías. Las puertas y ventanas también deben ser revisadas, casi que con lupa, porque entre las hendijas por lo general hay pequeños huecos, especialmente en los pegues, que se van incrementando en tamaño con los años y que son los responsable de un enorme gasto en el sistema de calefacción. Rellene con masilla los huecos, o desmonte las puertas y ventanas, y vuélvalas a colocar si siente que es necesario.

Revise además las claraboyas en el techo, las paredes exteriores y asegúrese de reparar cualquier pequeño daño, porque el agua ingresa, se congela y destruye todo a su paso. Si hay árboles frondosos, terminada la temporada de otoño revise las ramas, verifique que están en buen estado, porque con una caída de nieve, el peso que se acumula las quiebra y al caer pueden generar mucho daño en la casa, o herir a cualquier persona.

Cualquier duda que tenga por favor háganos llegar su carta vía email al correo: info@lupeledesma.com.

Por: Lupe Ledesma