Tranquila y serena Ana Gabriel dijo a su público: “Sí estuve en reposo para poder estar aquí con ustedes”.
Así comenzó la cantante originaria de Guamúchil su primer concierto en el Auditorio Nacional, explicando el porqué de su cancelación de algunas fechas de su gira Estamos a tiempo en octubre.
Ana Gabriel dijo que había sido algo extraordinario, porque en sus 45 años de carrera nunca había sucedido algo parecido, pero por indicaciones del médico debió guardar reposo, sin revelar la causa de su padecimiento, y el público le manifestó su amor y apoyo con aplausos.
El Auditorio retumbó cuando un coro de 10 mil personas acompañó a la cantante en un popurrí ranchero.
“Quiero decirles que con estos conciertos cierro mi etapa en México, pero no le voy a decir a adiós a mi país porque todavía no me retiro, simplemente esta gira se va al extranjero y ya no vendrá a México. Les pido que en los momentos que vamos a estar juntos seamos felices, quiero que sientan esa energía y amor que nosotros traemos para ustedes”, expresó Ana Gabriel.
Esta vez no había butacas vacías, ni siquiera los lugares en lo alto y en el rincón.
El momento de sus éxitos de las décadas de los 80 y 90 llegó, 14 músicos hicieron la magia de llevar al público por este viaje en el tiempo.
Después Ana Gabriel rindió un homenaje a Juan Gabriel y Rocío Durcal, acompañada por cuatro guitarras.
Un momento muy bonito a la vista se logró cuando ella pidió que prendieran las luces de los celulares para iluminarla mientras cantaba Luna.
Un último bloque se realizó con la presencia de Banda ADR, que puso más ritmos a la noche. “No saben cuan agradecida estoy por esta noche, me llevo su aplauso, gracias México porque no me han soltado de la mano, siempre me han sostenido”, expresó antes de decir adiós.
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