El propietario del Grupo Artevino dialogó sobre ese binomio perfecto que hacen los grandes vinos y la gastronomía
Casa Brugal y Enoteca fueron los anfitriones de Lalo Antón en República Dominicana. El propietario de Pruno, Izadi, Flor de Vetus, Malpuesto, Finca Villacreces y Orben, visitó el país para sostener un encuentro con conocedores y dialogar sobre el fascinante mundo del vino y la gastronomía.
“Soy un apasionado de los vinos. Transmiten cultura, calidad, personalidad, historia… En República Dominicana son cada vez más los que disfrutan esa experiencia única que significa maridar y compartir un vino excepcional. Finca Villacreces, Orben y Malpuesto, son ideales para ello”, expresó Antón.
En el 2000, cuando Lalo Antón se incorporó a la empresa fundada por su padre, impulsó la comercialización en el exterior, así como la expansión de Artevino, abordando los proyectos de Finca Villacreces, en la Ribera del Duero, Bodegas Vetus, en Toro y Rueda, y Orben, en la Rioja.
Las cuatro bodegas mantienen una personalidad única y bien diferenciada, aunque comparten una misma misión: la elaboración de vinos de calidad a partir de variedades nacionales en las zonas más emblemáticas de sus respectivas denominaciones de origen, las más prestigiosas de España.
“Desde nuestros orígenes, el vino ha estado muy unido a la gastronomía y pretendemos que siga siendo así. Hemos venido a tienda Enoteca porque apreciamos mucho la pasión de los conocedores dominicanos por la grandiosidad de nuestros vinos y la autenticidad que ellos expresan”, afirma Antón.
Los vinos Pruno, Izadi, Flor de Vetus, Malpuesto, Finca Villacreces y Orben forman parte del portafolio de marcas icónicas de Casa Brugal y están disponibles en tiendas Enoteca.
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